Tamaño de fuente: - +
Me incorporé abruptamente, con el corazón latiendo desenfrenado y sudando copiosamente
¡Qué sueño más horrible acababa de tener! Dios... Había sido tan real. Aún sentía la angustia por el rechazo de Bella, favorablemente todo había sido una pesadilla y las cosas estaban normales con ella.
No me perdonaría perderla jamás. ¡Jamás de los jamases!
Bella es el amor de mi vida y no permitiré que nada me aparte de ella.
Intenté normalizar mi respiración agitada y tras tomar unos sorbos de agua comencé a sentir mejor. Al colocar el vaso de agua nuevamente en mi mesa de noche me fijé que eran apenas las 3:37 de la madrugada
Me recosté nuevamente intentando poder relajarme para dormir, aunque no era nada simple, mi corazón continuaba agitado y parecía no querer sosegarse
*
Al despertar aquella mañana ya me sentía nuevamente en paz, dentro de lo que cabía evidentemente tras semejante sueño
Pase por Bella al dpto bn pues era sábado y nos tocaba juntarnos con Melissa para visitar las distintas opciones de iglesias, y con un poco de suerte poder encontrar la adecuada para la boda
Bella me recibió radiante, su hermoso rostro destilaba alegría y sus hermosos ojos verde claro brillaban sin cesar. Tuve que estrecharla entre mis brazos interminables minutos ni bien abrió la puerta
De sólo pensar en el sueño me daban ganas de abrazarla y no soltarla más... jamás me perdonaría perderla
— Ey, que sucede mi amor ¿Todo bien? — preguntó seguramente percatándose de mi necesidad de estrecharla por tiempo indefinido
— Todo bien amor — la seguí estrechando entre mis brazos como si no existiera un mañana — Es sólo que tuve una pesadilla, soñé que te perdía y pues... Quedé nervioso. No sabes lo mucho que te amo, lo mucho que te necesito, y lo mucho que deseo compartir mi vida contigo mi amor. Por favor nunca me dejes
Ella se separó un poco de mí para observarme durante algunos segundos. Rodeó mi cuello con sus brazos y se acercó para unir sus labios a los míos en un largo beso que me devolvió el alma al cuerpo. Sentir la tibieza de sus labios eran la mejor medicina que podía desear en aquel momento
Tras largos minutos disfrutando de nuestros labios se separó sonriente para tomar aire
— Cuéntame de ese sueño cariño — tomando de mi mano me hizo seguirla al interior del dpto y nos sentamos en el sofá — Me da curiosidad por saber qué soñaste
Le conté del sueño tal y cómo había acontecido, lo real que me había parecido y cómo había despertado tan nervioso y angustiado de pensar que había sido real
— Ay mi cielo — apoyó su frente con la mia tiernamente — Fue sólo una pesadilla mi vida, yo jamás me apartaré de ti, eres mi vida y quiero que lo seas eternamente
Se separó un poco para mirar sus anillos en su dedo anular
— Nos casaremos y disfrutaremos de una hermosa vida juntos. Eso fue un sueño y nada más que eso mi amor — me sonrió
— Diría más bien que fue una pesadilla — sonreí también, por fin me sentía mejor y más tranquilo
Desayunamos juntos, debo confesar que las habilidades culinarias que Bella había adquirido con el curso eran increíbles, yo no me quedó atrás tampoco, pero ella por lejos cocina mil veces mejor y juntos preparamos un desayuno delicioso ideal para disfrutar y pasar todas las penas
Tuvimos tiempo de mimarnos y consentirnos, antes de la reunión con Melissa
A la hora convenida llegamos a la dirección que nos había indicado. La primera iglesia era simplemente bellísima, muy elegante y sofisticada pero sin caer al extremo de ser ostentosa. La verdad nos gustó bastante
Fuimos con Melissa a visitar una segunda iglesia que quedaba a unos 15 min, la verdad era linda pero no tanto como la primera, Melissa percibió en nuestros rostros que no nos agradó lo suficiente e insistió en que visitamos la tercera opción que tenía planificada
Tardamos poco más de 20 en llegar pero nada más verla sentí hacer click con el lugar. Miré de reojo a Bella quien admiraba embelesada la belleza de aquel lugar, su mirada brillaba y su inmensa sonrisa me hizo darme cuenta que aquel era la elegida. Melissa ingresó a hablar con encargado mientras nosotros admirábamos la belleza de lo que nos rodeba
— Creo que esta es amor, ¿Qué piensas? — le pregunté aunque se podía ver en su rostro lo mucho que le agradaba aquel lugar
— Amor estoy totalmente de acuerdo — su gran sonrisa lo confirmaba — Es la iglesia más hermosa que he visto en mi vida y me parece perfecta para la boda
Melissa en cuanto volvió nos llevó a recorrer todo el recinto y entre más lo miramos más nos gustaba
— Creo que este es el lugar — sonrió Melissa — Sus caras lo dicen todo
Asentimos a la vez con Bella
— La verdad nos encanta — sonreí
— Es realmente perfecta — suspiró Bella
— Y son muy afortunados porque me acaban de confirmar que hay fecha disponible para el día en el que quieren realizar la boda. Si están seguros reservaré fecha inmediatamente, ahora que si quieren ver más opciones hay un par de Iglesias más en mi listado para visitar
Añadir a la biblioteca 